En un hecho histórico para Corea del Sur, el presidente Yoon Suk-yeol ha sido destituido de su cargo tras la aprobación de una moción de juicio político en el Parlamento. La decisión fue impulsada por la polémica declaración de ley marcial el 3 de diciembre de 2024, la cual fue vista como una violación de la Constitución y un intento de restringir los derechos democráticos de la población.
El Parlamento, conformado por 300 legisladores, aprobó la moción con 204 votos a favor, 85 en contra y 3 abstenciones, superando el mínimo necesario de 200 votos para destituir al presidente. Esta decisión coloca a Yoon Suk-yeol en una situación crítica, ya que su permanencia en el cargo ahora depende del fallo del Tribunal Constitucional, que deberá ratificar o revocar la destitución en un plazo de 180 días.
¿Por Qué se Declaró la Ley Marcial?
El presidente Yoon justificó la imposición de la ley marcial como una medida para «proteger el orden constitucional», alegando la existencia de «actividades antiestatales». Además, acusó a la oposición de controlar el Parlamento y de tener vínculos con Corea del Norte. La ley marcial incluyó medidas extremas, como:
- Prohibición de todas las actividades políticas.
- Control estatal de los medios de comunicación.
- Prohibición de huelgas y paros laborales.
Sin embargo, la reacción de la sociedad surcoreana fue inmediata e implacable. Miles de ciudadanos salieron a las calles en protesta, exigiendo la revocación inmediata de la medida. La presión fue tan fuerte que Yoon decidió retirar la ley marcial solo seis horas después de haberla decretado. Este episodio fue el detonante para que la oposición presentara la moción de destitución.
El Proceso de Destitución
El juicio político contra Yoon fue impulsado por la oposición parlamentaria, que presentó la moción de destitución poco después de la retirada de la ley marcial. Aunque el Partido del Poder Popular (PPP), que apoya a Yoon, anunció públicamente que se opondría a la destitución, algunos de sus miembros votaron a favor, lo que fue determinante para alcanzar los 204 votos necesarios.
Con la aprobación de la moción, Yoon ha quedado suspendido de sus funciones de forma inmediata. El primer ministro Han Duck-soo asumirá como presidente interino, mientras se espera el fallo del Tribunal Constitucional. Este proceso podría extenderse hasta 180 días, durante los cuales se evaluará si el presidente violó la Constitución al imponer la ley marcial.
Reacciones Internacionales y Nacionales
La destitución de Yoon ha generado reacciones internacionales y nacionales. Estados Unidos y la Unión Europea han expresado su preocupación por la estabilidad política en Corea del Sur, un país clave en la región asiática.
A nivel nacional, miles de ciudadanos se manifestaron en Seúl para celebrar la destitución de Yoon. Muchos consideran que la destitución representa una victoria de la democracia frente a un intento de concentración de poder. Las imágenes de la multitud celebrando en las calles de la capital surcoreana han dado la vuelta al mundo.
«Esta destitución es un mensaje claro: nadie está por encima de la Constitución», declaró uno de los manifestantes en Seúl.
¿Qué Sucede Ahora?
Con la suspensión inmediata de Yoon Suk-yeol, el primer ministro Han Duck-soo asume de forma interina la jefatura de Estado y Gobierno. No obstante, el futuro del país está en manos del Tribunal Constitucional, que deberá emitir un fallo definitivo.
El proceso de destitución seguirá los siguientes pasos:
1️⃣ Revisión del Caso: Los magistrados del Tribunal Constitucional analizarán las pruebas y alegatos presentados.
2️⃣ Audiencias Públicas: El presidente Yoon Suk-yeol podrá presentar su defensa y argumentos legales.
3️⃣ Decisión Final: El Tribunal tiene hasta 180 días para emitir su veredicto. Para ratificar la destitución, se requiere el voto de al menos seis de los nueve jueces.
Si la destitución se confirma, Yoon será removido del cargo de forma permanente y Corea del Sur deberá convocar a elecciones presidenciales para elegir a un nuevo mandatario. Este sería el segundo presidente en la historia de Corea del Sur en ser destituido por juicio político, después de Park Geun-hye en 2017.
Impacto Económico y Político
El anuncio de la destitución de Yoon ha tenido impactos económicos inmediatos. El Ministerio de Finanzas de Corea del Sur ha convocado reuniones de emergencia para abordar los posibles efectos en los mercados financieros y la estabilidad económica del país.
«Estamos monitoreando de cerca la situación para mitigar cualquier posible impacto en la economía nacional», declaró el ministro de Finanzas surcoreano.
La incertidumbre política generada por la destitución ha puesto a Corea del Sur en una situación de inestabilidad, especialmente en un momento en que el país enfrenta desafíos económicos globales y tensiones geopolíticas con Corea del Norte.
La destitución de Yoon Suk-yeol representa un hito en la historia política de Corea del Sur. La decisión del Parlamento de aprobar la moción de juicio político envía un fuerte mensaje sobre la importancia de la Constitución y el respeto por los derechos democráticos.
Ahora, la atención se centra en el Tribunal Constitucional, que tiene la última palabra sobre el destino de Yoon. La comunidad internacional sigue de cerca esta situación, con la mirada puesta en la estabilidad política y económica de Corea del Sur, una de las principales economías de Asia.
Si se confirma la destitución, Corea del Sur deberá convocar elecciones presidenciales para elegir un nuevo líder. Con la experiencia previa de la destitución de Park Geun-hye en 2017, el país se enfrenta nuevamente a la prueba de su sistema democrático.