La nueva ley antitabaco que prepara el Ministerio de Sanidad ampliará los espacios libres de humos a terrazas, marquesinas, vehículos de uso laboral, campus universitarios, patios de institutos, instalaciones deportivas, piscinas de uso colectivo y zonas exteriores de ocio, en cuya concreción está trabajando el ministerio.
Esto incluye tanto tabaco convencional, como calentado o vapers, que serán equiparados normativamente al tabaco convencional en cuanto a restricciones de uso en espacios públicos, según ha informado este jueves Sanidad tras unas declaraciones de la ministra, Mónica García, adelantadas a la Cadena SER.
García no ha puesto fechas para estos hitos. “Esperamos que el borrador de la ley pueda ver la luz pronto y sea una realidad lo antes posible. Cada espacio ganado al humo del tabaco es un espacio ganado a la salud y a la vida”, ha dicho la ministra en unas declaraciones remitidas a los medios de comunicación
En una entrevista con EL PAÍS esta semana, García apostó por una medida lo más ambiciosa posible para que “España vuelva a estar a la vanguardia en las políticas contra el tabaco”. Se refirió también al complicado trámite parlamentario que la ley tiene por delante: “Espero que no claudiquemos ante los lobbys que están ejerciendo una presión importante como han hecho siempre. Y el lobby del tabaco está haciendo su trabajo. Pero el nuestro es defender la salud de la población, de la ciudadanía”.
Esta medida emana de un plan contra el tabaco que fue aprobado en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud por todas las comunidades autónomas. En él no se especificaba dónde se prohibiría fumar, pero sí explicitaba la aspiración de ampliar los espacios libres de humo.
De esa estrategia también han salido otras iniciativas, como un real decreto para regular los nuevos dispositivos para fumar, las bolsas de nicotina o la futura imposición del empaquetado genérico para los cigarrillos y el tabaco de liar. Entre otras cosas, prohíbe los saborizantes en los vapeadores, para tratar de evitar que los jóvenes comiencen este hábito, una medida que fue impugnada por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia y que se encuentra ahora en periodo de alegaciones en la Unión Europea.
En el marco de la semana sin humos y a las puertas del Día Mundial Sin Tabaco (el 31 de mayo), esta asociación, junto con otras organizaciones y sociedades médicas, promueven un manifiesto para promover “una generación libre de tabaco”.
Reclaman al Gobierno central y todas las fuerzas políticas un consenso para una regulación que proteja a los jóvenes y promueva la salud de la población “equiparando plenamente los cigarrillos electrónicos, tabaco calentado, bolsitas de nicotina y pipas de agua al tabaco tradicional en cuanto a publicidad, promoción, patrocinio y prohibición de uso en lugares públicos cerrados”. Piden también un “etiquetado claro” sobre los efectos nocivos de estos productos, la inclusión de advertencias sanitarias en las producciones audiovisuales con escenas de tabaco y nicotina y transparencia sobre financiación de la industria tabaquera y sus aliados en cualquier aspecto cuando aparezcan estas escenas.
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Source: elpais.com