Estados Unidos no consentirá ningún acuerdo en La Haya (Países Bajos) que no pase por un consenso para aumentar al 5% del PIB el gasto en defensa de la OTAN y espera que todos los miembros de la Alianza, incluida España (que prevé llegar este año al 2%), acepten esta nueva meta. Así lo ha señalado este miércoles el embajador norteamericano ante la Alianza Atlántica, Matthew Whitaker.
“Cada aliado debe comprometerse a invertir al menos el 5%” del PIB en defensa, ha afirmado en una videoconferencia con periodistas en vísperas de la reunión de ministros de Defensa de la OTAN que se celebra este jueves en Bruselas, donde se dará el visto bueno a los nuevos objetivos de capacidades —los recursos militares que necesita la Alianza para cumplir su misión de defensa y disuasión— hasta 2032. En esta cita, además, se seguirá discutiendo el incremento de gasto en defensa que centrará la cumbre de la OTAN del 24 y 25 de junio en La Haya.
Para hacer más digerible ese 5% reclamado por el presidente estadounidense, Donald Trump, y con muchos aliados apenas rondando aún el 2% acordado hace algo más de una década en Gales, el secretario general de la Alianza, Mark Rutte, ha lanzado una propuesta que eleva el gasto neto en defensa hasta el 3,5% y destina el restante 1,5% a seguridad, en un sentido más amplio.
Whitaker no ha indicado si ese plan, que cada vez más aliados han aceptado —no así España, que sigue mostrándose reacia a hablar de porcentajes, dado que considera que ese es un cálculo político para sobre todo apaciguar a Trump— será avalado por Washington. Pero sí ha dejado claro que la cifra final es inamovible y, además, una propuesta de mínimos: el 5%, ha subrayado el embajador del país norteamericano, uno de los hombres de máxima confianza del inquilino republicano de la Casa Blanca, “no es una sugerencia, sino un punto de partida”.
Las presiones para aumentar el gasto de los aliados en defensa ya están dando resultados. Esta misma semana, en una reunión en Lituania, 14 miembros de la OTAN —del norte y del este de Europa— se comprometieron a trabajar para llegar a ese 5%.
Consciente de que aún hay reticencias respecto a los porcentajes y, también, al calendario de 2032 propuesto para alcanzar los nuevos objetivos de gasto —que para algunos países, como los del noreste de Europa, es una fecha demasiado lejana ante la amenaza de Rusia, mientras que otros reclaman analizar antes de fijar el calendario saber qué y cómo se puede gastar de forma coherente—, Rutte ha evitado mencionar una cifra concreta este miércoles. Sí ha dejado claro, una vez más, que el compromiso del 2% alcanzado en 2014 en Gales ya no basta. Y ha recalcado que el objetivo que salga de La Haya debe ser mucho más ambicioso.
Una aceleración que corresponde a la demanda de Washington. “Esperamos un crecimiento significativo y creíble [del gasto en defensa] año tras año”, ha dicho Whitaker quien, si bien tampoco ha querido fijar un calendario, sí ha indicado que Washington no tolerará un camino tan largo como el que supuso cumplir el compromiso de Gales. “Seamos claros: no hay un tiempo ilimitado, no podemos tener otro compromiso como el de Gales, con aliados que no cumplen sus compromisos diez u once años más tarde”, ha recriminado.
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Source: elpais.com