Una España sin brillo tumba a Italia y firma su primer pleno en la fase de grupos de la Euro

España cerró esta noche el primer pleno de su historia en una fase de grupos de la Eurocopa con una victoria sin brillo ante Italia. La selección, que había volado ante Portugal y Bélgica y ya había conseguido el billete para cuartos, también tumbó a las transalpinas, pero su juego estuvo muy lejos de la excelencia que había mostrado en las dos primeras jornadas. La máquina de fútbol que había sido el equipo de Montse Tomé no apareció este viernes en Berna. A la Roja le faltó ritmo, parsimoniosa en las combinaciones, sin el filo ni la chispa suficientes para agujerear con continuidad el 5-4-1 que propuso el seleccionador italiano. El grupo, que se supo reponer al gol tempranero de Oliviero con los tantos de Athenea, Patri y Esther para sellar el tres de tres y medirse con la anfitriona Suiza el próximo viernes, también volvió a preocupar al mostrar de vuelta cierta fragilidad defensiva.

El tanto dio a la Roja un tramo de control en el que encajonó a Italia, pero al combinado de Tomé le faltó siempre velocidad para trenzar el pase final con el que encontrar una posición franca de gol. Salma, otra vez en punta, dio la impresión de estar muy incómoda ante la ausencia de espacios para correr y el marcaje pegajoso de las centrales. Si a España le faltó filo, Italia volvió a plantarse ante Nanclares con una facilidad asombrosa en otra transición rápida, aunque Bonansea remató alto. Un instante antes, Paredes había despejado con la mano un centro desde la derecha, pero el VAR no señaló penalti porque Cantore había recibido ligeramente adelantada antes de colgar el balón al área.

El encuentro, con el grupo decidido, perdió más ritmo mientras Nanclares dejaba una parada de postal ante un disparo de Cantore que desvió María Méndez y Tomé regalaba más minutos a la joven Vicky López, fantástica en los dos primeros choques. También entraron Pina, Zubieta y Esther. La pichichi de la Euro puso el lazo a la victoria con su cuarto gol en el torneo. El estadio fue una fiesta para los aficionados italianos pese a la derrota y también para los españoles a pesar de las dudas que dejó en defensa España, que ha encajado en 10 de los últimos 11 partidos y necesita ajustarse en las transiciones si no quiere llevarse ni un susto en los cuartos ante la novata Suiza.

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