Europa diseña un “muro de drones” para blindarse frente a Rusia

La incursión de drones rusos en Polonia, el pasado miércoles, ha revelado grietas en la detección y las defensas europeas frente a la amenaza del Kremlin. Cuando la invasión de Rusia sobre Ucrania va camino de su cuarto aniversario y el autócrata ruso Vladímir Putin aumenta sus acciones de guerra híbrida contra Occidente, la Unión Europea diseña un “muro de drones” para blindar sus cielos de las aeronaves no tripuladas que el Kremlin ha convertido en parte fundamental de su estrategia militar.

La idea del “muro de drones” aún es muy incipiente en Bruselas, donde tiene como gran partidario al comisario europeo de Defensa, Andrius Kubilius. No es novedad en los países bálticos, en Finlandia o en Polonia. De hecho, a principios de año, Estonia, que se ha propuesto integrar drones de ataque y observación en las brigadas de sus fuerzas terrestres, reclamó la financiación de un programa de este tipo. En los últimos meses, también Alemania se había sumado a la propuesta de lanzar esa barrera que aspira a cubrir desde Noruega hasta Polonia; empezando por los lugares estratégicos y los puntos de población. La Comisión Europea, no obstante, no lo había colocado como prioridad en una agenda en la que la defensa sí es central.

Tras el incidente del miércoles, el más serio entre la OTAN y Rusia en décadas, la jefa del Ejecutivo comunitario decidió abrazar el concepto de “muro de drones”. “Debemos atender el llamamiento de nuestros amigos bálticos y construir un muro de drones. No es una ambición abstracta. Son los cimientos de una defensa creíble”, dijo Von der Leyen el miércoles, en su discurso sobre el Estado de la Unión. “Hay que dotar a Europa de medios estratégicos independientes. Debemos invertir en la vigilancia espacial en tiempo real para que ningún movimiento de fuerzas pase desapercibido”, añadió.

Lo sucedido en Polonia no es un incidente aislado. El viceprimer ministro polaco, Władyslaw Kosiniak-Kamysz, ha asegurado que en lo que va de año se han producido ya nueve incidentes: en Moldavia, tres en Rumania, tres en Lituania, dos en Letonia y uno en Bulgaria. Sin contar con los de los últimos días en Polonia y Rumania.

La incursión de drones del pasado miércoles llega en un momento especialmente caliente para el debate sobre defensa en Europa, donde los Gobiernos están rascándose los bolsillos para incrementar sus presupuestos en esas partidas para satisfacer las exigencias de EE UU y para cubrir las grietas que la guerra de Rusia contra Ucrania ha revelado en sus propias fuerzas y arsenales.

Los jefes de Estado y de Gobiernos analizarán la idea del muro de drones y otros grandes programas europeos a principios de octubre, en una reunión en Copenhague que estará muy centrada en la defensa europea.

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