Tras el lema “Dejadnos trabajar” el sector se ha manifestado este miércoles frente al Ministerio de Agricultura, donde han acudido 5.000 veterinarios de varios puntos del país, según los organizadores de la protesta. María Ángeles Borrego ha viajado desde Sevilla y asegura que los cambios ya le están afectando “psicológicamente”. “No podemos curar bien, no podemos imponer nuestro criterio, el tratamiento que creemos es mejor para el animal”, lamenta. “Queremos libertad para ejercer la profesión”, añade Borrego. Además de veterinarios, también han acudido dueños de mascotas, como Francisco Sánchez, vecino de Parla, tiene un perro, y colectivos animalistas, como Pacma. El presidente del partido animalista, Javier Luna, ha criticado que se quiera “atar de pies y manos” a los veterinarios “poniendo en peligro la vida de los animales”. Estas son las claves de la protesta del sector veterinario:
Además, los asistentes a la manifestación también se quejan de la fiscalidad. Sostienen que mientras la sanidad humana tiene un IVA reducido, los servicios veterinarios están gravados con un 21%, “lo que encarece los tratamientos y dificulta su acceso”, lamentan los organizadores de la protesta.
El Ministerio de Agricultura asegura, sin embargo, que este reglamento “no condiciona en absoluto el juicio clínico del veterinario”. Lo que se busca, añade, es “introducir transparencia en el sistema” de forma que se pueda “conocer en profundidad el uso de antibióticos”.
Ante la confusión que se ha generado, la Dirección General de Derechos de los Animales, dependiente del Ministerio de Consumo, ha elaborado una nota en la que establecen los protocolos de actuación en el caso de que lleguen animales sin identificar a las clínicas veterinarias. En ella se indica que se podrá tratar a determinados ejemplares sin identificar (colonias felinas, animales abandonados o vagabundos), indicándolo en la receta o en la ficha clínica.
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Source: elpais.com