Una revisión de los protocolos de las comunidades revela que cuentan con normas para evitar escándalos como el de Andalucía, donde 2.000 mujeres no recibieron información sobre sus mamografías
Tras un cribado de cáncer de mama, “todas las mujeres deben ser informadas del resultado”, independientemente de cuál sea. Lo dice Cristina Romero, especialista en la materia de la Sociedad Española de Radiología Médica (SERAM), que defiende unos programas, los españoles, “que son referencia en Europa y salvan vidas”. Los protocolos de la mayoría de las comunidades autónomas establecen estas comunicaciones, y pruebas adicionales en un corto plazo de tiempo en el caso de que los resultados no sean concluyentes, según ha confirmado EL PAÍS.
Esto no sucedió en Andalucía con alrededor de 2.000 mujeres, a las que nunca les llegó el resultado de su prueba, algunas de ellas con anomalías, y que en algunos casos acabaron desarrollando un cáncer que no se trató a tiempo por una posible negligencia que ya está en manos de la justicia
El Gobierno andaluz interpreta que esta última versión no recoge los plazos que sí se incluían en la modificación de 2005 que establecía tiempos de respuesta obligatorios tras la realización de la prueba: 15 días para analizar la mamografía desde su realización; 30 para comunicar los resultados y 15 o 30 días para contactar con las beneficiarias, en función del resultado de la prueba, ya fuera benigno o maligno.
Estas comunicaciones se parecen, de una u otra forma, a lo que incorporan los protocolos de la mayoría de las comunidades que las consejerías de salud han trasladado a este periódico, o bien que son accesibles en internet.
La médica se esfuerza en subrayar la importancia de que las mujeres vayan al cribado sin miedo: “Tenemos tecnología muy avanzada, que emiten mínima radiación y que son capaces de detectar un tumor de tres milímetros. Y en este caso el tamaño importa. No es lo mismo tratarlo ahí que cuando mide dos centímetros”.
Es por esta razón por la que los cribados se generalizaron en España a partir de los años 90. Son las comunidades autónomas y sus servicios de salud los que tienen las competencias, y los protocolos tienen ligeras variaciones, pero en esencia, se parecen mucho.
Esto no quiere decir que siempre se cumplan, como recuerda la Asociación Española Contra el Cáncer, que alerta de que hay poca información sobre los retrasos y que es imposible saber los plazos reales, más allá de los que están sobre el papel.
En cuanto al método de contacto, algunas precisan que se realiza una llamada telefónica, otras por mensajes, por carta, y las hay que no especifican.
La consejería de la Generalitat de Valencia informa de que tras el cribado, solo 3 de cada 100 mujeres necesitarán de otras pruebas en el Hospital que le corresponda según su sistema de aseguramiento, para confirmar o descartar el diagnóstico, tales como ecografías o biopsias.
“Es normal que se inquiete pero debe saber que en la mayoría de los casos el resultado será normal. Sólo a 1 de cada 10 mujeres se les diagnosticará un cáncer de mama. En esos casos la mujer será citada en la consulta del Hospital correspondiente para ofrecerle toda la información necesaria y personalizar su tratamiento”, concluye.
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Source: elpais.com
